Más de 30.000 personas fueron evacuadas de sus hogares entre la tarde del martes y la mañana de este miércoles, después de que un feroz incendio arrasara los vecindarios de Palisades, Eaton y Hurst, en Los Ángeles. Agravado por los fuertes vientos, el dramático avance de las llamas provocó el cierre de muchas autopistas y rutas en el sur de California.

Los caminos cerrados por los incendios

Las autoridades locales anunciaron el cierre de varias autopistas y carreteras en el sur de California debido a los incendios forestales y a las condiciones del viento. A la 1.30 de la madrugada del miércoles, se informó que los siguientes tramos estaban cerrados, según detalló Caltrans en X.

• El tráfico en dirección sur en Pacific Coast Highway estaba cerrado en Cross Creek Road. Los carriles en dirección norte estaban cerrados en McClure Tunnel.
• El tráfico en dirección oeste de la autopista 10 se estaba desviando en Lincoln Boulevard, Topanga Canyon Boulevard estaba cerrado en ambas direcciones entre Pacific Coast Highway y Mulholland Drive.
• En Azusa, San Gabriel Canyon Road estaba cerrada al norte de la ciudad. Solo se permitió la entrada a los residentes.
• Los carriles en dirección oeste de la autopista 210 estaban cerrados en Roxford Street. El tráfico se estaba desviando allí.
• Los carriles en dirección este de la autopista 210 estaban cerrados en la autopista 5.
• Los conectores en dirección norte y este de la autopista 5 a la autopista 210 en dirección este estaban cerrados.
• Se cerraron los cinco carriles para camiones en dirección norte desde la autopista 210 hasta la ruta estatal 14.

Ante cualquier duda, las autoridades recomiendan a los conductores que consulten los Mapas rápidos de Caltrans donde la información es actualizada casi en tiempo real.

Incendios en Los Ángeles: Newsom declaró estado de emergencia

Asimismo, los funcionarios detallaron que numerosos edificios quedaron destruidos y casi 1200 hectáreas ardieron en la exclusiva zona de Pacific Palisades, entre las ciudades costeras de Santa Mónica y Malibú. La situación se complicó por la presencia de vientos fuertes que avivan el fuego y dificultan la tarea de los equipos de emergencia

Las tormentas de vientos de Santa Ana, de más de 97 kilómetros por hora (60 millas por hora), avivaban el fuego en varias zonas este martes y alcanzaron una velocidad de 112 km/h (70 mph) la mañana del miércoles, según reportes recibidos por la delegación en Los Ángeles del Servicio Meteorológico Nacional.

Las autoridades estiman que podrían alcanzar los 160 km/h (100 mph) en montañas y colinas, incluidas áreas que no han tenido lluvias significativas en meses, según publicó Reuters.

Ante la gravedad de la situación este miércoles, 19 distritos escolares en todo el condado de Los Ángeles anunciaron cierres relacionados con incendios forestales, según un reporte de la Oficina de Educación del condado, reproducido por CNN. El Distrito Escolar Unificado de Los Ángeles, es el segundo más grande de Estados Unidos, con casi quinientos mil estudiantes. Las autoridades están trabajando con los servicios de emergencia para mantener a resguardo las vidas de los vecinos.

Consejos para la seguridad ante incendios y vientos

Las autoridades instaron a los ciudadanos a inscribirse en servicios de alerta gratuitos a través del portal ready.ca.gov, donde pueden recibir información actualizada por teléfono, correo electrónico o mensajes de texto. También indicaron:

• Tener un plan de emergencia que contemple apagones y la refrigeración de medicamentos.
• Preparar radios a baterías para recibir actualizaciones.
• Evacuar de inmediato ante órdenes oficiales y no esperar hasta último momento.

Además, enfatizaron la importancia de:

• Evitar conducir sobre líneas eléctricas caídas y reportar su presencia.
• Permanecer en interiores durante las tormentas de viento.
• Reducir la velocidad al conducir y mantener distancia con otros vehículos.

El estado de emergencia declarado por Newsom busca garantizar una respuesta coordinada y efectiva frente a la crisis. Aunque las condiciones climáticas representan un desafío significativo, los equipos de emergencia continúan trabajando para proteger a las comunidades afectadas y mitigar los daños.